
- Vino ayer a decírtelo, para que no te enfadaras. Estabas dormida.
Sivé sigue mirando a la ventana, siguiendo las gotas con los labios apretados. Le fastidia. Entonces ve la leche. Se encoge de hombros y se resigna:
- No pasa nada. Podemos jugar aquí.
Se ve que la nieve tambien ha decidido salir a jugar hoy, le ha dado envidia de lluvia. Hoy Sivé y todos nosotros nos quedaremos mirando desde la ventana. Un beso^^
ResponderEliminarme gusta jugar con el frio!
ResponderEliminarCon lo chulo que es jugar bajo la lluvia, ¿cómo puede preferir jugar en la habitación? ¡No puede ser!
ResponderEliminarmiaumiauconsaboracereza